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Zenobio Saldivia M.* y  Maryorie Maya G ** 

Codazzi, sus primeros pasos y sus estudios 

Giovanni Agustín Codazzi nació el 10 de julio de 1793 en la localidad de Lugo, de la legación de Emilia Romagna, Estados Pontificios, en la actual Italia.  Hijo de Doménico Codazzi y de Constanza Bartolotti.[1] Su infancia transcurrió en una época turbulenta de la historia de Italia; en efecto, tres años después de su nacimiento, los ejércitos napoleónicos invadieron los Estados Pontificios y la ocupación napoleónica afectó la vida de la familia Codazzi, puesto que su padre se dedicaba a la fabricación y comercio de la seda, que era la única manufactura importante para el siglo XVIII en la Italia del norte. Y en este contexto, la política impuesta por Napoleón que pretendía favorecer la industria francesa por sobre la italiana, hizo que esta última entrara en un franco deterioro; ello, sumado a los altos impuestos y al bloqueo comercial continental, impactó en el comercio de las sedas italianas que dependían en este período principalmente del mercado británico. Por ello, muy pronto sobrevienen dificultades económicas y las enfermedades no tardaron en agobiar a esta familia.[2] Uno de los biógrafos de Codazzi, Nicolás Perrazo, sostiene que Agustín Codazzi tuvo seis hermanos y hermanas, de los cuales cinco murieron en la infancia.[3] 

Codazzi en su niñez recibió lecciones de Pier Matteo Zappi, un hombre ciego, que le habría enseñado los rudimentos de gramática y latín.  De esta educación temprana, según se presume, pasó a los dos ciclos bienales de la Scuole Elementari de Lugo, seguidos por cuatro años de Scuole Ginnasiale, donde aprendió más gramática, más latín, humanidades y retórica.[4] 

Pero la ocupación napoleónica si bien afectó a la familia del joven Codazzi, también lo estimuló para buscar nuevos horizontes.  Así, luego de un breve período como escribano en el Juzgado de Paz de Lugo, decide abandonar su patria y enrolarse en la milicia.  Por ello, en 1811 a la edad de 18 años, el joven Codazzi se presenta en Bolonia como voluntario ante el mayor Pier Damiano Armandi, del Real Teggimento d’ Artiglieria a Caballo, quien lo asigna a la Academia de Pavía.[5] Y dos años después, ya integrado a las fuerzas napoleónicas y al igual que todo el ejército italiano, se encuentra combatiendo en la Campaña de Alemania, donde se destacó en distintas batallas. En 1818, decide viajar a América motivado por la simpatía que despertó en su espíritu la gesta de los países del Nuevo Mundo. Por ello tras arribar en Baltimore, en Estados Unidos, casi de inmediato principió a combatir a favor de los independentistas de América Meridional, entre 1819 y 1822. Al año siguiente regresó a Italia pero no logró acomodarse y por ello volvió a América en la primavera de 1826; donde poco después el vicepresidente de Colombia, Francisco de Paula Santander, lo nombró comandante de artillería.[6] 

En cuanto a  su formación como geógrafo, el propio Codazzi no nos ha dejado testimonio alguno, aunque sí existen evidencias acerca de su gran facilidad para las operaciones geodésicas y topográficas. Al enrolarse en el Regimiento de Artillería  a Caballo, Codazzi no solo ingresó al mundo de la milicia, sino que también al mundo de los mapas y de la cartografía en general. Su entrenamiento como artillero y como topógrafo, debe haber tenido lugar desde fines de 1811 hasta principios de 1813 en la Scuola Teorético-Pratica d’Artiglieria de Pavía.  En este hito evolutivo de Italia, todo soldado, suboficial u oficial del cuerpo de artillería, tenían la obligación de asistir a la Escuela Teórico Práctica y éste es, sin duda, argumento suficiente para afirmar que Codazzi tuvo allí su aprendizaje inicial en cuanto al conocimiento de las ciencias de la tierra.[7] Tales enseñanzas, giraban en torno a asignaturas prácticas, esenciales para la formación de un buen artillero; v. gr.: redacción de informes, diseño de trigonometría para el dibujo de mapas, matemáticas para el cálculo de la trayectoria de proyectiles, métodos prácticos para medir superficies, descripción y uso de la escuadra de agrimensura, los principales métodos para medir el área irregular, métodos prácticos de aproximación para la medida de prismas truncados de una elevación o depresión del terreno, reducción aritmética y gráfica de un ángulo en el horizonte, y otras; es decir, todas las técnicas necesarias para confeccionar adecuadamente un mapa.[8] Lo anterior,  aseguraba un alto nivel de enseñanza basada en una política estricta de selección de profesores y conferencistas, normalmente procedentes de las universidades de Bolonia y de Pavía.[9] 

Su metodología de trabajo 

Tratar de reconstruir el pensamiento geográfico y el método de trabajo cartográfico de Agustín Codazzi, no es tarea fácil, debido a que sus observaciones en estas materias son escasas y sus notas están dispersas entre sus manuscritos y obras publicadas. Empero, Codazzi por su formación en Pavía,  (entre 1811 y 1813) que era esencialmente matemática y orientada hacia la medición de superficies -como mencionamos con antelación-  y por sus contactos con oficiales franceses durante las guerras napoleónicas, en contra de Alemania, deber haber aprendido muchos conocimientos cartográficos.  Por todo lo cual, estaba en óptimas condiciones para aplicar los conocimientos de este tipo luego en el Nuevo Mundo. Una dificultad adicional, para hacer esta  evaluación, es el hecho de que los análisis que hasta hoy se han realizado de sus mapas; particularmente los de Alfred Hettner y Francisco Javier Vergara y Velasco, son superficiales, y se refieren a la Carta General y al Atlas de los Estados Unidos de Colombia elaborados por Manuel Ponce de León y Manuel María Paz, publicados en 1865. Estos mapas, ofrecen una visión parcial y en gran medida distorsionada del trabajo de Codazzi.  No es mucho lo que dicen Hettner y Vergara sobre los métodos de Codazzi.  El primero, afirma que en la construcción de su carta el sabio italiano “utilizó los puntos astronómicos de Humboldt para la determinación de coordenadas geográficas de ciertos lugares, y por lo demás parece basada en levantamiento de ruta y por lo mismo tiene considerables errores en la ubicación de los pueblos”.[10] Y Vergara y Velasco, por su parte, señala que Codazzi “procedía levantando el plano de una red de itinerarios, siempre de mallas muy abiertas, sobre el cual apoyaba, mediante rápidas triangulaciones, los puntos aledaños de importancia, completando el resto de la topografía por informes de los conocedores, excursiones breves, documentos locales, etc.”.[11]   

En rigor, el número de puntos astronómicos de latitudes y meridianos establecidos por Codazzi durante sus exploraciones por Venezuela, fue considerable: determinó 1.002 puntos, 58 de los cuales se pueden equiparar con los cálculos de Humboldt y Boussingault. También determinó, la altura de 1.054 puntos con barómetros Fortin. Estos datos sobre las alturas permiten una clara visión del relieve del espacio que debe quedar consignado en los mapas; Codazzi también observó con cuidado y continuidad los fenómenos climáticos y además fue muy cuidadoso con los datos estadísticos de la población, pues no se limitó a consignar los más conocidos sino que partiendo de aquella información, hizo sus proyecciones.[12] Y desde el punto de vista del apoyo bibliográfico en relación a su trabajo sobre Venezuela, utilizó las fuentes previas de José Luis de Cisneros: Descripción Exacta de la Provincia de Benezuela (1764); el texto de Francisco Depons: Viaje a la Parte Oriental de Tierra Firme (1806), y el trabajo de Alexander Humboldt: Viaje a las Regiones Equinocciales del Nuevo Continente (1799-1804), con lo cual su obra geográfica y cartográfica va adquiriendo su perfil.[13] Estas y otras obras de Humboldt lo van marcando fuertemente para articular su propia visión geográfica de Venezuela y Colombia. 

Con razón, más tarde en París, el 15 de marzo de 1841, el matemático y físico Dominique François Jean Arago, el geólogo  Elie de Beaumont y otros científicos que respaldaron el trabajo de Codazzi, en la Academia de Ciencias de París y en el Instituto de Francia;  enfatizaron mucho en los métodos rigurosos utilizados en el levantamiento cartográfico por el militar y geógrafo, destacando que el oficial Codazzi había utilizó los puntos astronómicos determinados por Fidalgo y Humboldt, estableciendo las horas, mediante cronómetros muy bien instalados.[14] 

Pero dejando a un lado estos aspectos, Codazzi debió tener un gran talento para poder representar cartográficamente una región desde un solo punto de observación tan correctamente y hasta en sus últimos detalles, y para usar acertadamente la información de la gente común; recurso metodológico muy utilizado desde fines del Siglo XVIII y comienzos del XIX.[15] 

La influencia de algunos maestros en ciencias de la tierra 

En cuanto a las influencias que recibió Codazzi para la posterior ejecución de su trabajo cartográfico, están los aportes de Humboldt y Boussingault. Al respecto, el propio Codazzi ha señalado: “…a Humboldt le debemos los mapas, además del ordenamiento de nuestras más importantes plantas, sin olvidar aquí a Bonpland, quien lo acompañó en su trascendental viaje. Boussingault, como botánico y químico, nos enseñó sobre los productos de nuestra propia tierra. Roulin enriqueció, a fuerza de ágil observación y de exactas descripciones, los catálogos europeos con maravillosos ejemplares de nuestro mundo animal”. [16] 

Codazzi -para articular sus trabajos- además de las obras ya mencionadas  de Cisneros, Depons y Humboldt, consiguió también algunas obras cartográficas: Una de Humboldt, que contenía los levantamientos cartográficos del camino de La Guaira a Caracas, los cuadros sobre el desplayamiento  del río Orinoco, y los viejos mapas de éste, también los dibujos de toda la subcuenca del Orinoco, además de los ríos Atabapo, Casiquiare, Negro, Apure, Meta, Caura y Guaviare. Después en Santafé de Bogotá, el Ministro del Interior Don Pedro Alcántara Herrán, que se interesaba mucho por los trabajos de Codazzi, le aportó un mapa especial de Roulin y el Atlas de la extinguida Colombia, publicado en 1827 en París, que contenía, además de un mapa general del viejo territorio colombiano, cartas de los doce departamentos en que se dividía, no sin valor, pero sí carentes de bases científicas y en las cuales figuraba Restrepo como autor.[17] Luego, años después, tras la lectura de algunas obras de Humboldt, Codazzi se enteró de un trabajo reciente del alemán Robert H. Schomburgk, quien -al servicio de Inglaterra- había explorado durante casi cinco años la región de las Guayanas y acababa de publicar en Londres los resultados de tales exploraciones científicas, donde se apreciaban descripciones relativas a la geografía de la cuenca del Orinoco, entre otros lugares. Codazzi, por tanto, decide seguir la pista a estos trabajos, probablemente la Descripción de la Guyana británica (1840). No olvidemos que Codazzi admiró el trabajo de Humboldt y que se apoyó mucho en la obra Viaje a las Regiones Equinocciales del Nuevo Continente (1799-1804) -como ya hemos mencionado- y siempre lo consideró su maestro. Y a su vez, Humboldt también le reconoce a Codazzi su esfuerzo por describir el corpus geográfico de Venezuela y Colombia, tal como se lo hace saber en una conceptuosa carta del 20 de junio de 1841.[18] Así que es un reconocimiento mutuo y caballeresco. 

Sus aportes científicos 

Codazzi realizó numerosas contribuciones científicas que se ubican en disciplinas tales como la geografía, la orografía, la hidrografía, la potamología, la topografía y la cartografía; pero su obra no se constriñe a un solo país, toda vez que realizó exploraciones y tareas científicas tanto en Venezuela como en Colombia, inmerso en los procesos políticos de consolidación republicana de ambos países. Por ello, analizaremos parcialmente los aportes científicos de este militar-geógrafo en relación a Venezuela y luego profundizaremos sobre sus conquistas cognitivas relativas a Colombia. 

Algunas contribuciones científicas en Venezuela[19] 

En Venezuela en 1826, como se ha señalado, es nombrado comandante de Artillería, con sede en Maracaibo. Luego, es designado jefe de la división de matemáticas en la Escuela Militar de Caracas y posteriormente profesor de ciencias de artillería. Más tarde el Presidente de la República de Venezuela, lo designa miembro de su Estado Mayor y le asigna la confección de una Geografía Estadística de la República y de un Atlas cartográfico de todas las provincias de la joven república.[20] Sin embargo, todo este tratamiento preferente no logró satisfacer las necesidades apremiantes para el grabado e impresión de su obra geográfica en curso, por lo que recurrió a principios de 1840 al Congreso de Venezuela, y éste ordenó el 16 de marzo, disponer de la suma de diez mil pesos para el proyecto, siempre y cuando se consiguiera un fiador para devolver el dinero en caso de incumplimiento del contrato. Esta fianza la asumió Don Martín Tovar y Ponte, uno de los hombres más respetados de Caracas, con lo cual la empresa de Codazzi quedó totalmente asegurada.[21] Empero, en la joven República de Venezuela no se contaba aún con los medios técnicos especializados para este tipo de impresiones, de modo que Codazzi, su familia y sus colaboradores y amigos Rafael María Baralt y Ramón Díaz, se embarcaron, el 11 de julio de 1840, rumbo a Europa, para finiquitar sus grabados en París.[22] Codazzi, acomodado ya en París con su familia, principia con sus colegas el trabajo de tres tomos que abarcaría la historia política y geográfica de Venezuela. Codazzi, por lo pronto, presentó las planchas originales de sus mapas a las personas entendidas, antes que sufrieran deterioro: entre éstos al físico Dominique François Jean Arago; quien presentó a su vez, dichas planchas a la Sociedad Geográfica. Por su parte, el 4 de septiembre, el naturalista Sabine Berthelot informaba en dicha entidad que  el coronel Codazzi, procedente de Puerto Cabello, había viajado a Francia por encargo del gobierno de Venezuela para hacer grabar e imprimir su gran Mapa de Venezuela y su Atlas ordenado por provincia. Dicha institución honró a Codazzi, nombrándolo socio. Y en general, todos los miembros de esta institución “admiraban su obra y lo elogiaban del modo más sincero”.[23]

El Atlas Físico y Político de la República de Venezuela, se publicó en 1840 y

entre los mapas que incluía, figuraban:  

-Campañas de Independencia en Venezuela, Nueva Granada y Quito. 1819-1820.

-Campañas de Independencia en Ecuador, Perú y Bolivia. 1823-1826.

-Capitanía General de Venezuela.1810.

-Provincia de Guayana, Cantón Caycara,

-Provincia de Guayana, Cantón Angostura; además de los mapas de las distintas provincias que existían a la fecha de publicación del Atlas en comento.[24] 

A su vez, el Resumen de la Geografía de Venezuela se publicó en 1841. Esta obra estaba destinada especialmente a apoyar  la instrucción pública y perseguía también dar cuenta ilustrada de los avatares de la historia política de Venezuela, amén de consignar la descripción geográfica de ese país. El libro parte dando cuenta de la geografía física, desde la situación geográfica de Venezuela y  las provincias de la época, límites  políticos, hoyas hidrográficas, superficie, aspectos orográficos, descripción de flora y fauna. Luego, sigue la geografía política enfatizando en la población, antecedentes históricos y etnográficos. Y finalmente la detallada geografía  y divisiones territoriales y sus producciones de cada una de las provincias de la época: Caracas, Carabobo, Barquisimeto, Coro, Maracaibo, Trujillo, Mérida, Barinas, Apure, Barcelona, Cumaná, Margarita y Guayana.[25] Desde la perspectiva contemporánea de la historia de la ciencia, llama mucho la atención la cuidadosa identificación de los especímenes florísticos, herbáceos, arbóreos, que señala y sintetiza el autor. Y lo propio se observa en relación a los exponentes de la fauna venezolanis. Al respecto, sabemos que recibió la colaboración de los sabios Roulin y Berthelot y de estudiosos adscritos al Museo mejicano, para estos tópicos;[26] pero aún así, es impresionante el acopio descriptivo  y la inserción bien estructurada de tales referentes en esta obra. Es un verdadero catastro que complementa la información geográfica del cuerpo físico del país.  

En rigor, Codazzi entre los años 1830 a 1840, prácticamente da cuenta geográficamente de más de un millón y medio de kilómetros cuadrados,[27] si tenemos presente que en este período nuestro científico se desplazaba por la República de la Gran Colombia. Y luego ya específicamente en lo que hoy es la República de Colombia, por ejemplo entre 1849 a 1855, sabemos que recorrió más de veinte mil kilómetros de vías fluviales y terrestres; tomando centenares de cotas y determinando las  coordenadas de puertos, montes, aldeas y pueblos. 

Codazzi y sus logros científicos en la joven República de Colombia 

En 1849 desde la gobernación de la provincia de Barinas, Codazzi tuvo que enfrentar de nuevo la inestabilidad política y se ve obligado a salir de Venezuela. Entonces, dado este estado de cosas, decidió aceptar la propuesta del general Tomás Cipriano de Mosquera, a la sazón Presidente de Nueva Granada durante su primer período (1845-1849), para trabajar en el Colegio Militar y desempeñarse como geógrafo. Otra vez, Codazzi llegaba a un país agitado por las tensiones políticas y las guerras civiles. Igualmente, arribaba a un país donde la exploración del territorio con estatuto científico y el manejo del espacio y el conocimiento del cuerpo físico, eran una preocupación relevante para las autoridades que requerían información para futuras decisiones administrativas y/o para la formulación de leyes; o simplemente para elegir eventuales lugares para  asentamientos humanos y/o para aprovechar los recursos naturales, o para el control regional.[28]   

La diferencia que encontró Codazzi entre Nueva Granada y Venezuela desde el punto de vista científico, se centra básicamente en el hecho de que en Nueva Granada existía una trayectoria científica y cultural más notoria que en Venezuela, y además porque en Nueva Granada el quehacer científico tenía una tradición más colegiada, de mayor preocupación por el trabajo en equipo, tal como observó luego el propio Codazzi, al interactuar con los miembros de la Comisión Corográfica en dicho país, tras asumir la dirección de la misma. A diferencia del trabajo individual realizado por Codazzi en Venezuela, en  la actual Colombia,  desde un principio asumió  una labor colectiva y altamente especializada: debió interactuar con geógrafos, cartógrafos, botánicos, pintores y escritores que estaban dispuestos a cumplir las altas exigencias científicas, administrativas y normativas, y deseosos de obtener los mejores resultados. 

En este contexto, Agustín Codazzi asumió la dirección de la Comisión Corográfica en 1850, encargado fundamentalmente de la parte geográfica y cartográfica de la misma. Dicha Comisión tuvo su génesis en una iniciativa del general Tomás Cipriano de Mosquera, quien logró convencer al militar y científico italiano para que la ejecutara. Para ello, el coronel Codazzi debió recorrer las diferentes provincias de Nueva Granada entre 1850 y 1859.

En cuanto al equipo humano y científico de la Comisión propiamente tal, recordemos que en la Dirección estaba Codazzi y que también era el encargado de la parte geográfica y cartográfica de la misma. En lo administrativo  por su parte, quedó en una primera etapa, el abogado Manuel Ancízar, quien fue  además el secretario del jefe de la Comisión, y también en lo científico debía responsabilizarse de la confección de estadísticas y de dar cuenta de los aspectos costumbristas y de la vida social y cultural de Colombia, hasta 1852. El médico José Jerónimo Triana, a su vez, asumió como responsable del acopio de un herbario y de los estudios de la flora; por su parte, el acuarelista Carmelo Fernández, el pintor Enrique Price y el cartógrafo y pintor Manuel María Paz; participaron como los dibujantes y cartógrafos de la Comisión. Por su parte, el educador Santiago Pérez continuó en 1852 con las actividades encargadas previamente a Manuel Ancízar; y tras la muerte de Codazzi en 1859, el periodista y geógrafo Felipe Pérez, continúa este esfuerzo cartográfico y geográfico iniciado por Codazzi, tomando apuntes de los cuadernos del militar italiano y complementándolos con su propio acopio de datos históricos y geográficos, hasta publicar en 1863 la Jeografía Física i Política de los Estados Unidos de Colombia General. Y a su vez, en 1865, publicó también la Jeografía Jeneral de los Estados Unidos de Colombia escrita de orden del Gobierno Jeneral. Y luego en 1889, publicó en París el Atlas Geográfico e Histórico de la República de Colombia; cerrando así el ciclo de los resultados científicos esperados de la Comisión Corográfica.[29] 

En rigor, en esta mega-comisión que además fue muy cambiante, trabajaron: Agustín Codazzi, (geógrafo-cartógrafo); Tomás Cipriano de Mosquera, (político y difusor científico, aspectos normativos), Manuel Ancízar, (Estadístico, secretario hasta 1852); Manuel Uribe Ángel (médico, geógrafo); Joaquín Esguerra; Francisco Vergara y Velasco; Eliseo Reclus; Ángel María Díaz Lemos;Carmelo Fernández (acuarelista y detalles gráficos 1850-1852);José Jerónimo Triana, (herborista);Carlos Martínez Silva, (periodista, escritor);Enrique Price (acuarelista);Santiago Pérez (educador, secretario a partir de 1852);Sergio Arboleda; Juan Manuel Royo; y Felipe Pérez (geógrafo y periodista, desde 1864);Manuel María Paz (pintor y cartógrafo, desde 1853); Manuel Ponce (ingeniero, desde 1859), y eventualmente Domingo y Lorenzo Codazzi; entre otros.[30] 

La Comisión Corográfica organizada bajo la dirección de Agustín Codazzi,  por tanto, fue el proyecto cartográfico más ambiciosos que se acometiera en este período de mediados del siglo decimonono en Colombia y permitió hacer el mapa del país mediante una serie de levantamientos parciales. Es importante comprender que dicha labor se dio en el marco de un proyecto político decimonónico, el cual buscaba conocer la geografía nacional y favorecer el proceso de administración de las antiguas provincias de Nueva Granada. Dicha Comisión fue también institución que continuó el trabajo de exploraciones, descripciones e inventarios, sobre el cuerpo físico del país, iniciado antes con Mutis en 1783, pero ahora bajo el sello político de la República de Nueva Granada y asentando así un antecedente de gran importancia en la trayectoria geográfica y en la investigación científica colombiana. 

Y en este contexto, Agustín Codazzi descolló como el hombre apropiado para inventariar, describir, clasificar y cartografiar todo el territorio de la actual República de Colombia. La selección de este militar y científico italiano para dicha empresa, por parte del general Tomás Cipriano de Mosquera, no fue utópica; sino más bien muy pragmática, realista y política. En efecto, Codazzi contaba a su haber con obras similares realizadas en Venezuela, tales como: la Geografía de Venezuela y el Atlas físico y político de Venezuela; obras celebradas por la Academia de Ciencias de París y la Sociedad Geográfica de Francia,[31] tal como ya lo hemos destacado. Y también porque Codazzi como militar, tenía ya de partida, un amplio conocimiento de los planes de defensa, fortificación y levantamiento de planos y mapas, adquirido en los distintos conflictos armados de Venezuela y además como resultado de su formación como ingeniero militar en Europa, estaba debidamente formado para realizar tales registros. Por lo anterior, creemos que no hubo tanta generosidad de Mosquera para la designación de Codazzi como director; sino más bien realismo puro. 

Algunos rasgos epistémicos y metodológicos descriptivos de los incrementos cognitivos de Codazzi 

Codazzi, tras asumir la dirección de la Comisión Corográfica, inicia la mega-empresa científica itinerante, con una serie de actividades que incluían tanto los viajes de observación, la recolección y descripción de especímenes, cuanto la medición y descripción lo más completa posible de cada una de las regiones estudiadas.[32] Y ante la imposibilidad de mencionar todos los logros de esta Comisión en disciplinas tales como la cartografía, topografía, orografía, potamología, hidrografía, climatología, estadística, sociología, comunicaciones y otras; nos limitaremos aquí a analizar su método de presentación o su modus operativo. Esta es esencialmente descriptiva, cualitativa y cuantitativa regional y local. Para ello seleccionamos a continuación algunas de sus principales presentaciones  sobre lugares relevantes de la actual Colombia. 

Así entonces, desde el punto de vista geográfico, para comprender mejor este estudio holístico que va dando cuenta de las distintas provincias  de la actual República de Colombia, tengamos presente que su estructura metodológica descriptiva, es muy completa y cubre al menos 8 puntos con los cuales  va construyendo la imagen físico-hidrográfica y social de la república. Estos son: una sinopsis con los antecedentes histórico-políticos de cada provincia; la indicación de la población existentes y las respectivas coordenadas geográficas; los límites de la provincia; la presentación de las características orográfica relevantes; la identificación de las propiedades y peculiaridades hidrográficas de cada provincia; las características del clima regional; la división político y religiosa regional; y el detalle cuidadoso de las vías de comunicación y los avances agrícolas e industriales  de cada provincia. Así, su prosa geográfica, organizada bajo esta estructura, va dando cuenta de todas las ciudades, pueblos, aldeas, montes y volcanes y sus coordenadas geográficas, y lo propio hace con los ríos, lagos y lagunas y la temperatura y pluviosidad de estas regiones; amén del detalle cuidadoso sobre los referentes bióticos exógenos y endógenos de cada provincia. Y además, considerando siempre los aspectos que puedan servir al desarrollo de lo que hoy día denominamos agroindustria. Y al igual que casi todos estos exploradores que recorrieron América Central y América Meridional, destacó notoriamente los aspectos relacionados con la vida social, las costumbres y la vestimenta; entre tantos y tantos otros. No en balde la Comisión Corográfica nos ha legado hermosos retratos, escenas costumbristas, paisajes e ilustraciones de la Nueva Granada de la segunda mitad del Siglo decimonono; al respecto recordemos los retratos de corte sociológico del antiguo militar y pintor Manuel María Paz tales como “Notables de la Capital”, o “”India y mestizo. Provincia de Pamplona”, o “Comerciante y minero. Provincia de Neiva”, por mencionar algunos.[33] 

Así por ejemplo, en relación a la provincia de Soto, luego de cumplir con lo referente a  la sinopsis histórico-política de la provincia, señala lo relativo a la población en estos términos. “Piedecuesta, ciudad de 4.000 almas, fundada en 1774 al abrigo de la mesa de Jerira, es la capital de la provincia, la cual se halla entre los 60 30’, 70 35’ de latitud Norte, y 00 13’ 50’’ y 10 longitud oriental del meridiano de Bogotá. Su territorio es de forma irregular, más largo que ancho, midiendo el contorno 87 leguas granadinas por distancias directas.”[34] Y en relación al tercer punto relativo a los límites, acota. “Confina esta provincia con la de Ocaña, Santander, Pamplona, y Socorro inmediatamente, y por medio del Magdalena, con las de Córdova, y Mompós en pequeña parte.”[35] Y en cuanto al punto referente a la hidrografía, señala: “El Lebrija, por su largo curso y el caudal que lleva, ocupa el primer lugar entre los ríos d esta provincia. Tiene su nacimiento, a 3.050 metros de altura en la mesa de Juan Rodríguez, al N.O. de Piedecuesta; pasa por los arrabales de esta ciudad, y recibe el río del Hato, que viene de la misma serranía y comienza en las filtraciones de la laguna Encantada, puesta en la cumbre, y al aproximarse a Jirón, le tributa el Río-frío, proveniente del páramo así llamado…”[36] Y así sucesivamente Codazzi, va cubriendo los puntos señalados con una penetrante descripción cualitativa y cuantitativa, tanto para esta provincia cuanto para todas las de la república. En rigor, recorre, explora y describe el corpus geográfico y biótico de las provincias de Soto, Santander, Pamplona, Ocaña, Antioquia, Medellín, Socorro,  Vélez, Tundama, Tunja, Córdoba, Mariquita, Barbacoas, Buenaventura, Cauca, Chocó, Popayán, Pasto, Túquerres, Bogotá, Casanare, Caquetá y Neiva. 

Uno de los aspectos que adquirió mayor trascendencia en el trabajo de Codazzi, fue la necesidad de alcanzar un conocimiento geográfico de las regiones de Colombia y enfatizar en la conveniencia de contar con las vías de comunicación. Dicha preocupación ya había sido expresada y enfatizada por los sabios neogranadinos de principios del siglo XIX, como por ejemplo Francisco José de Caldas, quien en distintas comunicaciones publicadas el Semanario del Nuevo Reyno de Granada, ya había aludido a estos temas, destacando la situación geográfica privilegiada de Nueva Granada que le permite contar con puertos en el Atlántico y en el Pacífico  destacando la abundancia de sus productos como un medio de conectar e integrar a la república a través del intercambio comercial.[37] Los planteamientos de Codazzi, por su parte, muestran un enfoque novedoso sobre las vías de comunicación. En efecto, este militar y geógrafo sugiere la conformación de un sistema de mercados y su relación con la consolidación del Estado. Codazzi señala al respecto, la conveniencia de interconectar las regiones entre sí como parte de un trazado nacional y no conectarlas individualmente con el extranjero, como se venía haciendo hasta entonces.[38] 

Inmigrantes para el progreso

Otro de los asuntos que interesó a Codazzi fue el de las inmigraciones; tema que apasionaba a muchos autores y políticos decimonónicos y del cual Codazzi no podía abstenerse. En efecto, es sabido que desde mediados del Siglo XIX, en la mayoría de las jóvenes repúblicas de América se creía que el incremento de inmigraciones de europeos traería aparejado para los habitantes de estos países, la consecución de riquezas y la obtención de los ideales de civilización y de progreso generalizado. Esto se percibe claramente en Chile desde la década del cincuenta del siglo decimonono, en que principian a llegar centenares de alemanes, como parte de este ideario.[39] Y lo propio acontece en Argentina  y otros países de América. Por ello, Codazzi en su época y al analizar el fenómeno en comento, señala valientemente que la escasa presencia de inmigrantes europeos en Nueva Granada y Venezuela, se debe principalmente a la inestabilidad política y a las continuas guerras civiles. Y agrega que los obstáculos geográficos, tales como la falta de vías, el calor, la humedad y el aislamiento regional, solo entorpecían parcialmente la colonización europea, pero que lo más grave era la inestabilidad política.[40] 

Por otra parte, Codazzi no desconocía las distintas propuestas de los geógrafos del siglo XIX sobre la reducción de indígenas, o acerca de la traída de inmigrantes europeos, o del establecimiento de misiones, o en cuanto a la vigorización de las razas nativas en  virtud de nuevos hábitos laborales y de convivencia social. Recuérdese que él coronel y geógrafo italiano sugirió incorporar alemanes cuando estaba en Venezuela y el mismo instauró una colonia alemana en Tovar, en 1843. Y volviendo a Colombia, Codazzi, pensaba que debían incorporarse capitanes pobladores de color y realizar una especie de “transmigración”, donde la raza negra terminara por absorber al indígena, que era percibido como semi-bárbaro y perezoso. Por ello  sugiere a las autoridades dictar leyes al respecto y constituir “…una buena policía, formada de los más inteligentes, activos y formales de entre los mismos negros, bien pagados, que serviría perfectamente”[41] a este propósito de motivar a los nativos. 

El Sueño ingenieril Transoceánico

En relación a ciertos aspectos geopolíticos, como por ejemplo sobre el sueño centroamericano de abrir un canal transoceánico, que ilusionaba a nicaragüenses, costarricenses y colombianos, y que muchos empresarios ingleses y algunos norteamericanos inducían a construirlo lo más pronto posible en alguno de estos países;[42] Codazzi aclara los anhelos con información científica dura. En efecto, recuérdese que Codazzi estuvo en el Darién como parte de sus exploraciones, en el año 1854 y dejó diversos manuscritos y notas sobre este istmo, en especial a su colaborador Felipe Pérez.[43] Con respecto a la construcción de esta eventual vía interoceánica en Colombia, por el Atrato o el Darién, Codazzi deja muy claro la imposibilidad de su ejecución, destacando que los informes difundidos por los ingleses no aludían a la existencia de las montañas en esta región y que son un óbice geográfico y técnico para tal proyecto. Por ello sugiere abrir dicha vía por el Canal de Panamá, por ser la parte más angosta del Istmo y porque ofrecería menos problemas ingenieriles. Esta postura de identificar al Canal de Panamá como lugar eventual de ejecución de tan caro anhelo de progreso centroamericano, se contrapone  con los informes de otros  exploradores que estaban recorriendo Nicaragua y Costa Rica contratados principalmente por empresarios ingleses, los cuales son respaldados por los intelectuales centroamericanos en general en este período.[44]  

En otro plano, sus anotaciones sobre el estado político de la frontera ecuatoriana y la falta de claridad en la definición de los límites con Venezuela, demuestran una visión política importante que complementa su labor geográfica. Al respecto, recuérdese el impacto social y el alto interés que alcanzaron a nivel nacional, en esta lonja de tiempo, la exploración del Istmo de Darién; así por ejemplo, entre 1850 y 1861, ocho mensajes presidenciales, se refirieron a los diferentes problemas confiados a la Comisión: los límites internacionales, la exploración de la zona del Istmo, las vías de comunicación, los proyectos de inmigración, la conveniencia de la utilización de baldíos y la división político-administrativa.[45] 

Del mismo modo, siete informes de la Secretaría de Relaciones Exteriores y once de la Secretaría de Gobierno, mencionaron estos trabajos. En este contexto, Codazzi para realizar su cometido, debió enfrentar las constantes modificaciones en el régimen político-administrativo, los trastornos políticos y militares, las dificultades topográficas y climáticas y las de tipo financiero y administrativo.[46] 

Un recuento cronológico de las actividades de la Comisión Corográfica arroja los siguientes datos importantes: En 1850 se inició la primera excursión, que partió de Bogotá hacia el altiplano cundi-boyacense y los Santanderes; en esta etapa se realizó la clarificación de la red hidrográfica del Orinoco y la determinación del sistema hidrográfico entre el río Magdalena y el Lago de Maracaibo. En 1852 el Congreso promovió a Codazzi al grado de coronel. A comienzos de este año, empezó la exploración de Antioquia, Cauca, Córdoba, Mariquita y Medellín; Codazzi resaltó allí las posibilidades de navegación por el Cauca. En 1853, exploró la región del Atrato hasta llegar a la frontera con Ecuador; sobre esta etapa, Gabriel Poveda Ramos opina que fue la más extensa y la que produjo más material de informes, planos, dibujos y datos sobre la flora.[47] 

En 1854, a raíz del derrocamiento de José María Obando por José María Melo, Codazzi debió unirse a los ejércitos del general Tomás Cipriano de Mosquera, como jefe de su Estado Mayor. Mosquera le encargó, además, la preparación de los documentos relativos a la campaña militar. En 1855 continuó la preparación del Resumen del diario histórico del Ejército del Atlántico, Istmo i Mompox, llamado después Ejército del Norte, levantado i mandado por el ciudadano General en jefe Tomás C. de Mosquera.[48] 

Este mismo año se dedicó al levantamiento del mapa de la hoya del río Bogotá. En 1856 recorrió las llanuras de San Martín y Casanare, Caquetá y Putumayo; pero durante la presidencia de Mariano Ospina Rodríguez, su proyecto encontró menos apoyo y muchas dificultades económicas que le impidieron emprender viaje hacia la costa norte. En 1858, Codazzi completó la geografía y los mapas del Estado de Cundinamarca. Y al año siguiente, decidido a concluir su obra, se dirigió hacia los estados de Bolívar y Magdalena, pero el 7 de febrero de 1859 la muerte lo sorprende en Colombia, en los alrededores de la Sierra Nevada de Santa Marta, el 7 de febrero de 1859  producto de una fiebre maligna.[49] 

En relación a las obras puramente geográficas de Codazzi sobre Colombia, recordemos al menos las siguientes: Jeografía física i política de la provincia de Ocaña (1850), Jeografía física i política de las Provincias de la Nueva Granada (1856), Descripción del territorio del Caquetá (1858). Y por supuesto, a este listado hay que adicionarle las Cartas informativas de la Comisión Corográfica (1850-1859), además de los numerosos informes geográficos y técnicos; entre estos por ejemplo: Labores. Camino de Rio negro en Antioquia. La Provincia de Antioquia. Caminos de Antioquia. Antioquia. El Puente del Río Balsillas. La Provincia del Chocó. La Provincia de Barbacoas. La Provincia de Buenaventura. La Provincia de Casanare. Una vía entre Popayán y el Pacífico. El Río Meta. El origen del Río Magdalena y otras particularidades. Y trabajos históricos como por ejemplo: Resumen del diario histórico del Ejército del Atlántico, Istmo y Mompox, llamado después Ejército del Norte (1855); o geopolíticos como: Apuntaciones sobre inmigración y colonización (1850). O bien los trabajos arqueológicos como: Antigüedades indígenas. Ruinas de San Agustín (1858);[50] o bien informes sociológicos como “Descripción General de los Indios de la Nueva Granada”,[51] por mencionar sólo algunos. Y por supuesto, a esta enumeración debemos agregarle los textos de geografía que se publicaron luego de la muerte del coronel Codazzi: la Jeografía física i política de los Estados Unidos de Colombia (1862) de Felipe Pérez, y luego la Jeografía Jeneral de los Estados Unidos de Colombia, escrita de orden del gobierno jeneral (1865), y también el Atlas de los Estados Unidos de Colombia, París, (1864) publicado por Manuel María Paz. Finalmente también en París, se publicó en 1889, el “Atlas Geográfico e Histórico de la

República de Colombia”,[52] y así se cerró el ciclo de las nuevas aprehensiones cognitivas de la Comisión Corográfica. 

Su legado Cartográfico 

Ahora bien, en relación a la aportación cartográfica sobre Colombia, tengamos presente que Codazzi, nos ha legado como resultado de su trabajo en la Comisión en relación al cuerpo físico de Colombia, decenas de mapas y cartas regionales. Con razón, diversos autores han estimado que su trabajo en la Comisión Corográfica (1850-1859), le significó un recorrido de más de 12.000 kms. por el territorio de Nueva Granada, lo que le permitió levantar cerca de 140 mapas entre los manuscritos y los impresos; además de unas 2000 láminas de interés geográfico y cartográfico.[53] En relación a los incrementos cartográficos que nos ha legado, destaquemos al menos los siguientes:

Carta de la Nueva Granada dividida en provincias  1832-1356.

Carta Jeográfica de los Estados Unidos de Colombia (Antigua Nueva Granada), 1865, edición oficial.

Atlas histórico geográfico, 1865.

Mapa de la República de Colombia (antigua Nueva Granada), Agustín Codazzi y Manuel María Paz, 1890, edición oficial, Erhard Schieble. Thierry Frères, Paris.

Atlas Geográfico e Histórico de la República de Colombia (Antigua Nueva

Granada), Agustín Codazzi, Manuel María Paz y Felipe Pérez, 1889, edición oficial, Imprenta A. Lahure, Paris.

Mapa de la Provincia del Cauca.

Mapa de la provincia de Buenaventura.

Mapa Topográfico de Bogotá y alrededores.

Mapa con las líneas de Correos de Colombia, dibujado por Codazzi y litografiado por Celestino y Jerónimo Martínez.

Mapas Corográficos:

De la Provincia de Tundama.

De la Provincia de Tunja.

De la Provincia de Vélez.

De la Provincia de Socorro.

De la Provincia de Soto.

De la Provincia de Córdoba.

De la Provincia de Medellín.

De la Provincia de Barbacoas.

De la Provincia de Túquerres.

De la Provincia de Casanare.

De la Provincia del Cauca.

De la Provincia de Buenaventura y del Estado de

Cundinamarca.[54]  

 

Hacia una conclusión 

Codazzi fue uno de  uno de los más destacados y prolíferos exploradores de la geografía de América Meridional. En rigor, logró articular el cuerpo físico de Venezuela y de la actual República de Colombia, principalmente desde la perspectiva de la geografía y de la cartografía. Y en Colombia su vasta obra concentrada en la Comisión Corográfica comenzada en 1850, es la continuación del primer gran proyecto científico de lo que hoy es Colombia iniciado por Mutis en 1783, tras articular la Expedición Botánica que duraría más de veinte años. Y si bien, el deceso de Codazzi no le permitió ver su obra completa, sus científicos escogidos previamente, lograron entregar los productos científicos esperados y cerrar la expedición, tal como ya lo hemos señalado.

Por otro lado, desde la perspectiva humana, la obra de Codazzi, es realizada con una gran tensión  personal, pues constantemente debió ir adaptándose a los vaivenes de la política, ora en Venezuela, ora en Colombia; todo lo cual, debe haberle significado un gasto emocional impresionante para poder seguir ejecutando su tarea geográfica y cartográfica y materializar su proyecto científico con su proyecto de vida. Y para poder así articular su producción cognoscitiva  con el gran proyecto de nación que sufre bruscos cambios. Así, los aportes geográficos y cartográficos de este sabio italiano, fueron el marco confiable que permitió a los políticos e inversionistas de fines del siglo decimonono, bregar por el desarrollo de la industria y la red de comunicaciones que principiaron  a consolidarse en la joven República de Colombia. Lo anterior, permitió asentar definitivamente el conocimiento de las ciencias de la tierra en la República de Colombia y retomar su autognosis, en estas disciplinas, tras el esfuerzo primigenio de Mutis. 

 

[1] Codazzi, Agustín: Resumen de la Geografía de Venezuela, T. I., Biblioteca Venezolana de Cultura, Caracas, 1940; Introducción; p.VII.

[2] Sánchez, Efraín: Gobierno y Geografía. Agustín Codazzi y la Comisión Corográfica de la Nueva Granada; Banco de la República, El Áncora Editores.  Bogotá, 1998; p. 89.

[3] Perrazo, Nicolás: Agustín Codazzi (1793-1859), Caracas, 1956; pp. 5-6.

[4] Magnani, Domenico: Biografía de Agustino Codazzi, Tipografía del Lavoro, Lugo, 1880, p.2.

[5] Ibídem.; p.3.

[6] Ibídem.; p.7. 

[7] Sánchez, Efraín: Gobierno y Geografía. Agustín Codazzi y la Comisión Corográfica de la Nueva Granada; op. cit.; p. 94.

[8] Ibídem.; p. 95.

[9] Ibídem.; p. 94.

[10] Hetter, Alfred: La cordillera de Bogotá. Resultados de viajes y estudios, Traducido por Ernesto Jul., Bogotá, 1966; pp. 24-25.

[11] Vergara y Velasco F. J.: Memoria sobre la construcción de una Nueva Carta Geográfica de Colombia y de un Atlas completo de geografía colombiana, Bogotá, 1906, p. 21.

[12] Cf. Codazzi, Agustín: Memorias, Documento electrónico. http://www.lablaa.org/blavirtual/biografias/codazzi-1/indice.htm Consulta: [6-07-2013].

[13] Cf. Venegas F., Pascual: Viajeros a Venezuela en los siglos XIX y XX, Ed. Monte Avila, Caracas, Venezuela, 1973;  p.40.

[14] Cf. Codazzi, Agustín: Memorias, Documento electrónico; op.cit.

[15] Justamente en este mismo ensayo, en el capítulo sobre Mutis, señalamos que este recurso a fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, era utilizado como complemento metodológico por sabios como Juan Ignacio Molina, José Celestino Mutis y Claudio Gay entre otros.

[16] Codazzi, A.: “El orijen del Magdalena i la Comisión Corográfica”, en: El Porvenir, Sta.Fé de Bogotá, N°117, 1 de Dic. de 1857.

 

[17] Cf. Codazzi, Agustín: Memorias, Documento electrónico; op.cit.  

[18] Cf. Vannini de Gerulewicz, Maritza: “Afectos científicos italianos”, en: Erickson, R.; Font, M.; Schwartz, B., (Coordinadores): Alexander von Humboldt. From the Americas to the Cosmos, Bildner Center for Wester Hemisphere Studies, New York, 2004;  p. 537. 

[19] Como ya se ha señalado aquí, en este apartado se analizan brevemente los aportes científicos de Codazzi en Venezuela; los lectores interesados en estudiar más en detalle la aportación cognitiva de este científico emiliano-romagnolo en Venezuela, pueden leer: Maya G., Maryorie y Saldivia M., Zenobio: “Agustín Codazzi y su aporte a las Ciencias de la Tierra en las Republicas de Venezuela y Colombia”, en Rev. Thélos, N°4, Utem, Stgo., Chile. Versión electrónica: http://thelos.utem.cl/category/revista-thelos-4/

[20] Cf. Magnani, Domenico: Biografía de Agustino Codazzi; op.cit.; p.8.

[21] Cf. Codazzi, Agustín: Resumen de la Geografía de Venezuela; T.I., op.cit.; p.XIX.

[22] Ibídem.

[23] Ibídem.

[24] Cf. Atlas Físico y Político de la República de Venezuela, Lithographie de Thierry Freres, Paris, 1840.

[25] Cf. Codazzi, Agustín: Resumen de la Geografía de Venezuela; op. cit.; T.I, II, III.  

[26] Cf. Codazzi, Agustín: Resumen de la Geografía de Venezuela; op. cit.; T.I.; p.3.

[27] Cf. Venegas F., Pascual: Viajeros a Venezuela en los siglos XIX y XX; op., cit.; p. 39.

[28] Cf. Gómez  G., Lucella: “Codazzi, Agustín” Documento electrónico:

 <http://www.lablaa.org/blavirtual/biografias/codaagus.htm> Consulta: [18-12-2013].

 

[29] Cf. Patiño M., Carlos A.: “Agustín Codazzi: Precursor de la Geografía en Colombia”, en línea: http://observatoriogeograficoamericalatina.org.mx/egal9/Teoriaymetodo/Investigacion/02.pdf  [consulta: 13 -04-2013].

[30] Los miembros de la Comisión Corográfica aquí indicados, han sido tomados a partir de: Agustín Codazzi, Vida y empresas de un geógrafo Emiliano-romagnolo en la América Tropical; Serie Multimedial editada por Turchi, María Cristina, en línea: http://www.codazzi.mitreum.net/es/biografia/biografia.php Fecha de consulta: [18-11-2014]. Y también de: Villegas V., Álvaro: “El Difícil arte de gobernar la Nueva Granada: Biopolítica y Proyecto Letrado en la Comisión Corográfica, 1850-1859”; Rev. Historia, PUCCh, Stgo., N°46, Vol.II, 2013; p.448. Y también de: Gómez  G., Lucella: “Codazzi, Agustín” Documento electrónico; op.cit. Y de Domínguez, Camilo Arturo:

“Felipe Pérez (1836-1891): geógrafo e iniciador de la novela histórica en Colombia”, en línea: http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/revistas/credencial/septiembre1991/septiembre4.htm  Fecha de consulta: [25-11-2014]. 

[31] Cf. Codazzi, Agustín: Memorias, Documento electrónico; op. cit.

[32] Cf. Gómez  G., Lucella: “Codazzi, Agustín” Documento electrónico; op. cit.

 

[33]  Cf. Tobar G., Oscar: “La obra pictórica de Manuel María Paz y la Comisión Corográfica”: En línea:  http://www.rtspecialties.com/tobar/conex1/ostogo/mmpaz.htm Consulta: [ 10-03-2014].

[34] Codazzi, Agustín: Jeografía Física y Política de las Provincias de la Nueva Granada, Comisión Corográfica, Publicaciones del Banco de la República, Archivo de la Economía Nacional, Bogotá, 1958; en línea: http://intranet.comunidadandina.org/Documentos/BDA/co-ca-0002.pdf Consulta: [10-12-2013]

[35] Ibídem.

[36] Ibídem.

[37] Vd. Por ejemplo: Caldas, Francisco José: “Estado de la geografía del Virreinato de Santa Fé de Bogotá, con relación a la economía y al comercio”, en el T.II, de la obra mencionada; pp. 15 y ss. de la Edición de la Biblioteca Popular de Cultura Colombiana, Bogotá, 1942.

[38] Cf. Cf. Gómez  G., Lucella: “Codazzi, Agustín” Documento electrónico; op.cit.

[39] Cf. Blancpain, Jean Pierre: Los alemanes en Chile, Edic. Pedagógicas Chilenas, Stgo., 1985.

[40] Cf. Gómez G.; Lucella: “Codazzi, Agustín” Documento electrónico; op.cit.  

[41] Cf. Codazzi, A.: “Carta al Gobernador de Barbacoas” (24-06-1853).

[42] Cf. Saldivia M., Zenobio: Una Aproximación al desarrollo de la ciencia en Nicaragua, Ed. Bravo y Allende, Stgo., Chile, 2008; pp. 47-62. Y también en: “Política, Tecnología e Imaginarios Colectivos de América”, Rev. Letralia, Cagua, Venezuela, Nov., 2006. En línea: http://www.letralia.com consulta: [16-11-2013].

[43] Cf. Restrepo, Vicente: Viajes de Lionel Wafer al Istmo del Darién; Impr. de Silvestre y Compañía, Bogotá, 1888; p.VIII. (Prólogo).

[44] Saldivia M, Z: Una Aproximación al desarrollo de la ciencia en Nicaragua; op. cit.

[45] Cf. Gómez Lucella, Giraldo: “Codazzi, Agustín” Documento electrónico; op.cit. 

[46] Ibídem.

[47] Ibídem.

[48] Ibídem.

[49] Cf. Codazzi, Agustín: Resumen de la Geografía de Venezuela; T.I., op.cit.; p.XXIX.

[50] Cf. Gómez Lucella, Giraldo: “Codazzi, Agustín” Documento electrónico; op.cit. 

[51] Cf.: Patiño M., Carlos Augusto: “Agustín Codazzi: Precursor de la Geografía en Colombia”, en línea; op. cit.

[52] Cf.: Patiño M., Carlos Augusto: “Agustín Codazzi: “Precursor de la Geografía en Colombia”; op.cit.

[53] Cf. Nieto, Mauricio et al.: Ensamblando la Nación, Cartografía y Política en la Historia de Colombia; Uniandes, Alfagura, Bogotá, 2010.

[54] La presente selección ha sido preparada a partir de:  Sánchez C, Efraín:

“Agustín Codazzi y la Geografía del Siglo XIX”: 

http://www.banrepcultural.org/node/32660    Y de: Blanco Barros, José A.:

“Historia de la Sociedad Geográfica de Colombia”. En línea:

http://www.sogeocol.edu.co/documentos/histo_sgc.pdf  Consulta:[20-01-2015]. Además de trabajo como los de: Patiño M., Carlos Augusto: “Agustín Codazzi: “Precursor de la Geografía en Colombia”; op.cit. Así como también del Mapa de la República de Colombia (antigua Nueva Granada), Agustín Codazzi y Manuel María Paz, 1890, edición oficial, Erhard Schieble. Thierry Frères, Paris. Y del Atlas Geográfico e Histórico de la República de Colombia (Antigua Nueva Granada), Agustín Codazzi, Manuel María Paz y Felipe Pérez, 1889, edición oficial, Imprenta A. Lahure, Paris; entre otros.

 

 

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Como muchos colegas, amigos y alumnos me han pedido que les indique dónde pueden encontrar material bibliográfico escrito por este autor e investigador y de dónde poder bajar algunos de estos trabajos, he decidido realizar esta página para atender debidamente a tales inquietudes. Aquí pueden encontrar sinopsis de libros de otros autores y colegas, que me han solicitado que les realice alguna reseña de sus textos; así como también por supuesto, de los libros del autor. Y en algunos casos es posible también bajar algunos libros. Continuaremos en este proceso de digitalización.

*

Zenobio Saldivia Maldonado. Profesor de filosofía (U. de Chile), Mg. en Filosofía de las Cs. (Usach) y Doctor en Pensamiento americano, con mención en Historia de las ciencias, (Usach), Santiago de Chile. Profesor Honorario de la U. Continental, Huancayo, Perú., Miembro Honorario del Colegio de Psicólogos del Perú, Ica Perú. Dr. Honoris Causa U. Ada Byron, Chincha, Ica, Perú. Miembro Honorario de la Universidad Continental de Ciencias y Tecnología, Huancayo, Perú. Profesor titular de la U. Tecnológica Metropolitana, (UTEM), Santiago. Diversos artículos suyos, sobre historia de las ciencias y epistemología, han aparecido en publicaciones de su país y de Argentina, Perú, Uruguay, Nicaragua, Panamá, El Salvador, México, Brasil, España, Costa Rica y EUA. Ha participado en eventos nacionales e internacionales. A la fecha tiene 26 libros publicados; entre los últimos se destacan: Lecturas de Epistemología, Editorial Bravo y Allende, Santiago 2020. El Mercurio de Valparaíso. Su rol de difusión de la Ciencia y la Tecnología en el Chile Decimonónico, (Bravo y Allende Editores, Stgo., 2010). Ensayos de Epistemología , (Compilador) (Bravo y Allende Editores, Stgo., 2012). Ensayos de Filosofía, (Bravo y Allende Editores, e Ilustre Municipalidad de Sta. María, Stgo., 2012), Adiós a la Época Contemporánea, Bravo y Allende editores, Stgo., Chile y U. Continental de Cs,. e Ingeniería, Perú, 2014). Actualmente se desempeña como profesor de Epistemología e Historia de las Cs., en la U. Tecnológica Metropolitana, Stgo., Chile y como Director del Depto. de Hdes. de la misma institución y Director de la Rev. Electrónica Thélos del Depto. de Hdes. de la U. Tecnológica Metropolitana.
Dirección: 
U. Tecnológica Metropolitana. Depto. Humanidades: Padre Miguel de Olivares N° 1620 Santiago, Chile.

Fono: +56-227877424

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